VI Encuentro RA: Reflexiones.

Hola a tod@s,

es domingo catorce de febrero y día de San Valentín, feliz jornada a todos con un poco de retraso, pero es que todo tiene una explicación. Hace pocas horas estaba en Madrid en dónde he pasado el fin de semana celebrando y compartiendo con amigas y compañeras el VI Encuentro RA.

No voy a hacer un relato de cómo se desarrollaron las jornadas, la verdad es que lo que más me apetece es hablar sobre sensaciones, sentimientos y reflexiones.

Desde que se inició el RA he acudido en todas sus ediciones excepto a la del año pasado. No pude cambiar el turno y al tener que trabajar me fue imposible acudir.

Tras un año complicado por cuestiones de salud, para mi, esta edición es especial. Al sentirme mejor de salud y teniendo la inscripción hecha en su tiempo, el acudir este fin de semana a Madrid ha sido como un chute de adrenalina y una enorme recarga de energía positiva.

Este tipo de eventos, además de propiciar el encuentro entre lectores y autores, es el momento en el que puedes verte con amigas y conocidas de las redes sociales con las que en el día a día no tienes la posibilidad de coincidir. 

Hacía más de un año que no había podido ver a mis amigas y estos días han sido unos tiempos emocionantes  y muy sentimentales. Para mí, esto es la vida, el poder estar con las personas que quieres y aprecias compartiendo un café, contando anécdotas y echándonos unas risas, que es lo que nos da muchas veces la fuerza y el estímulo para seguir el día. Sí, es muy poco tiempo y pasa volando, pero todo es mucho más intenso.

He conocido a nuevas autoras y hemos escuchado sus voces, así como, las de las autoras con más experiencia. El mundo de la literatura romántica se mueve y tiene que crecer y evolucionar, lo que me da respeto,  es si se está llevando a la velocidad adecuada. A veces tengo la sensación de que vamos tan deprisa que nos estamos dejando algo importante en el camino.

El mundo anglosajón de la romántica nos lleva mucha ventaja, pero quizás, lo que debemos hacer es fijarnos y aprender de ello, tanto lo bueno como lo malo y adaptarnos a nuestra idiosincrasia. El mercado americano es gigantesco y nosotros, somos los que somos. Es verdad que la lengua hispana es una de las más habladas junto con el inglés, pero para los autores de romántica es el inicio de una etapa que ha pasado de la nada a casi todo.

Todos los autores tienen el sueño de publicar sus novelas y todos los lectores buscamos ese relato que te llene y que recuerdes con cariño, teniendo ganas de volver a releer una cien y veces esas historias. El lector de romántica es un público muy fiel pero también es muy selectivo, por lo que pienso, que hay que tener mucho cuidado.

Siendo una devoradora de libros me di cuenta de que no he sido capaz de reconocer muchos de los libros que se presentaban o que encontrabas en la librería del evento. ¿Se publica demasiado? ¿Es positivo hacerlo así por qué de esa manera atraemos a más lectores? ¿Hablamos de calidad y/o cantidad? ¿Se están aprovechando las editoriales de toda esta situación?

Quizás debamos reflexionar y tener en cuenta todos los factores socio-culturales que nos envuelven. Si os dais cuenta a pesar de que estamos en crisis, cada vez aparecen más editoriales y se publican y auto-publican cantidades alucinantes de libros. 

Es verdad que es buena la variedad, pero demasiada creo que hace que nos perdamos. Siempre reclamos que se dignifique la literatura romántica, muy menospreciada por otros géneros literarios, pero no sé si este es el camino más adecuado. 

¿Tendría que tener más relevancia el lugar del representante literario?¿Los autores tendrían que tener más conocimientos sobre los entresijos de los contratos con las editoriales y sus posibles consecuencias? ¿Las editoriales nos manipulan?

Tengo dudas, muchas dudas que comparto con todos vosotros.

No quiero que os toméis esta entrada como una crítica, al contrario, quiero expresar mi respeto por el género, toda la gente involucrada y lo que está sucediendo. Siempre os explico que vengo de  la época de la llamada sequía literaria y quizás por ello, el tener tanto me avasalla. Tal vez todo sean imaginaciones mías. 

En algunas ocasiones no sé qué elegir y ya no sé si es por la cantidad o por que realmente de las múltiples posibilidades no hay muchas que me atraigan.

Como autora, es un momento especial en el que todo el mundo es receptivo y ves cómo tienes la posibilidad de que esas historias que rondan por tu cabeza, puedan ser compartidas con los demás y eso es muy gratificante. Pero también, tengo la sensación de ser un minúsculo pez en un gran océano. Mis expectativas al respecto es que la gente que llegue a leer mis escritos los disfrute, esa es mi gran satisfacción. No hay otro trasfondo, ya que tengo una vida fuera de la literatura y esa es la importante. La lectura y la escrituras son mis placeres y así quiero que continúe.

Dejo abiertas mis dudas y pensamientos para todos poder reflexionar sobre ello. 

Para finalizar, agradecer a Merche Diolch y todo el equipo del RA la gran organización y reconocerles el gran esfuerzo que hacen para poder llevar a buen termino el encuentro y que nos lo pasemos tan bien y cuando termina, siempre pensemos en las ganas de que el año pase pronto y de nuevo podamos volver a reunirnos. Desde mi pequeño blog, agradecerles toda la implicación y el trabajo.

Saludos.