martes, 25 de julio de 2017

Vacaciones: Primera parte





Hola a tod@s,
tras la entrada dedicada a la reflexión sobre el Congreso de Literatura Romántica celebrado en A Coruña y el estado de este género literario a principios de mes, he decido escribir sobre las vacaciones y sus implicaciones. 
Primera parte por qué he disfrutado de quince maravillosos días y en dos semanas más inicio una segunda quincena sin tener que pensar en ir a trabajar. 
Eso no quiere decir que ese tiempo libre lo dedique a estar tumbada en una hamaca dormitando o leyendo. En el fondo, a no ser que tengamos algún viajecito programado, nos dedicamos casi a trabajar más que cuando tenemos que responder ante nuestras responsabilidades laborables.
Dejamos para esos días todo lo que no podemos o no tenemos ganas de hacer durante otras épocas, como ir al dentista, al médico, cuidarnos a nivel estético etc, etc. Por lo que puedo decir, que casi necesitamos una semana más solo para recuperarnos de todo lo que hemos hecho. 
Tengo un calendario en la cocina que estaba más lleno de eventos y citas ahora, que casi durante el resto del año. 
De todas formas, ha sido muy satisfactorio el tener tiempo para poder dedicar a los amigos y familia, incluso a viajar, aunque hayan sido poquitos días, y a llevar una vida sin tener horarios fijos que a veces nos limitan de hacer cosas que en otros momentos querríamos hacer.
Cuidar de las plantas como se merecen, airear esos armarios en los que acumulamos todo tipo de cosas. y que un día te da ese impulso irrefrenable de que tienes que organizar y deshacerte de aquellos trastos que solo ocupan lugar y que, como con la ropa, guardamos por si acaso. 
Lo mejor sobre todo, ha sido el poder estar con mis seres queridos, y el pensar que en los próximos días de vacaciones voy a ver a parte de ellos que en julio no he podido. Amigos que hace más de un año con los que solo he contactado vía telefónica y que cuando nos encontremos será como si nos hubiéramos visto el día anterior, manteniendo ese feeling que hace que la amistad sea una fuente importante de energía y que llenan nuestras almas de una manera inimaginable.
Los días pasan y estamos tan centrados en el día a día, que todas estas situaciones excepcionales dan la sensación de que el tiempo transcurre de una manera muy diferente, parece que la alteración de la rutina nos hace vivir todo con mucha más intensidad, distrayéndonos de las situaciones en las que a veces nos perdemos y que no siempre son agradables.
Siempre pienso que uno de los mejores momentos de la vida es la tertulia que se produce después de esas geniales comidas o cenas con amigos o familiares. Con un poquito suerte en el mes de agosto podré acudir a la playa, que si no recuerdo mal, hace ya tres años que no piso y tengo como objetivo que al menos un día me dedicaré a disfrutarla.
El viaje a A Coruña fue genial, el reencuentro con amigas, que hacía años que no veía, fue indescriptible, prometo que no volverá a pasar, de alguna manera este otoño hay que buscar el tiempo para volver a vernos. 
Recomiendo, a las personas que puedan, que efectúen el viaje en el tren hotel, una experiencia increíble ya que por desgracia, desde mi ciudad a Galicia el viaje es largo y vale la pena hacerlo de noche. Además, creo que el tren de Barcelona a A Coruña es el único que queda en España que tiene este servicio, el AVE ha hecho que las distancias y los tiempos cambien, pero el encanto de un viaje lento en tren leyendo un buen libro puede ser una genial vivencia.
Para terminar quiero recomendar dos series estupendas para leer este verano: Serie Hermanos Mackenzie de Jennifer Ashley y Reapers MC de Joanna Wylde. Una serie es histórica y la otra contemporánea, muy diferentes pero a la vez maravillosas, cada una dentro de su categoría.



Saludos.

lunes, 10 de julio de 2017

Reflexiones tras el VI Congreso de Literatura Romántica Ciudad de A Coruña



Hola a tod@s,
este fin de semana se celebró el VI Congreso de Literatura Romántica en la maravillosa ciudad de A Coruña. Como en todas las ediciones anteriores, nuestra anfitriona fue la genial Trini Palacios, que nos recibió con todo el cariño del mundo. 
Por cuestiones sobre las que ahora no voy a disertar, hacía tres años que no podía acudir y quiero decir que han sido unos días fantásticos en compañía de amigas y de todos los asistentes, entre los que se encontraban, blogglers, autores, editores y lectores, unidos por una pasión común: la literatura romántica.
Aunque en nuestro país es un género bastante denostado, se demuestra en cada uno de los encuentros que se celebran a lo largo de la geografía española, que hay muchos lectores, además de que se están publicando gran cantidad de novelas románticas. Esto nos indica el auge en un tipo de literatura que, a pesar de las críticas negativas de algunos, ha crecido de manera espectacular desde hace algunos años.
Recordemos aquellas épocas de sequía en las que sólo podíamos comprar novelas de Danielle Steele, Jude Deveraux, Johanna Lindsey y cuatro más, o cuando preferías comprar los libros de la editorial Cisne en el hipermercado, ya que así, los podías esconder debajo de otros productos y poner cara de póquer cuando la cajera los cobraba, incluso cuando se forraban para evitar que se vieran esas portadas que lo único que han hecho es daño al género.
Digamos que el tema ha evolucionado de manera positiva, y ahora, encontramos gran diversidad de autoras tanto nacionales como extranjeras, y que los diferentes subgeneros nos permiten elegir historias de todas las épocas, paranormales e incluso fantásticas. Ahora puedes llegar a ellas en cualquier librería, on-line y los stands han tenido que aumentar su tamaño para poder presentar todas las novelas que ofrecen.



No sé si las famosas "50 Sombras de Grey" pueden ser un desencadenante, pero pienso que el auge de nuestro querido género, ya se había iniciado con anterioridad. Esta trilogía, en lo que influyó, es en que empezaron a publicar muchas más novelas eróticas.
Todo esto viene por qué, escribir es muy difícil si quieres hacerlo bien. A pesar de haber auto-publicado un par de libros, me considero más una lectora compulsiva  que una contadora de historias, eso me llevó a leer a nuevas autoras, y descubrir historias muy buenas y no tan buenas. 
Siento decir que me he hecho más selectiva con todo lo que se publica hoy en día, tanto vía editorial como auto-publicado. Soy una adicta a la literatura romántica desde siempre y como una drogadicta, busco emocionarme como con los primeros libros que leí, primero con las novelas blancas y después con las románticas al uso.
Pocas autoras están consiguiendo involucrarme en sus historias y transmitirme los sentimientos de los personajes. A veces pienso que no son los autores, soy yo la que está en una fase en la que no todo vale. Hay que ser muy respetuoso con los escritores y soy una ferviente creyente en que no a todos nos gustan los mismos autores, gracias a Dios, y que, para gustos los colores. 
Lo que no es de recibo, es que a los lectores se nos maltrate de manera continuada intentando meternos por los ojos, a base de machacar vía redes sociales, librerías o centros comerciales, novelas que no están bien traducidas o  escritas. Quizás es en parte culpa muestra, ya que está demostrado, que somos los compradores más fieles y que algunas editoriales han estado sobreviviendo gracias a este género, aunque nunca lo reconocerán.





Estas reflexiones son debidas a todas las conversaciones que he mantenido este fin de semana con otras lectoras y autoras, podría haber escrito una entrada sobre cómo se ha desarrollado el congreso, pero me parece muy importante que no olvidemos que estos coloquios en las comidas, o entre un acto y otro, son la realidad que muchas veces no tiene la suficiente visibilidad, siendo una parte a destacar de los diferentes encuentros. Incluso hay gente que las puede encontrar "políticamente incorrectas".
La voz de los lectores debería ser escuchada. Existe muy poca auto-crítica dentro de la literatura, esto también lo hago extensivo a otros géneros. He tenido conversaciones con lectores desde el género juvenil a los de policíaca y muchos coinciden en que la manipulación está al orden del día y que no todo lo que se edita es bueno.
Sí, es un negocio, pero sólo los que se renuevan, adaptan y aportan calidad, son los que crecen y se mantienen. 




Otro tema, sería las editoriales que timan a los escritores, algo que por desgracia también está sucediendo, no cobran y además les secuestran sus escritos durante años. Esto daría para otra entrada.
Es amplio y muchas veces desconocido el mundo editorial cuando abarcamos todas sus vertientes, por eso es importante que la gente se informe antes de firmar nada y que no sean los sentimientos, los que rijan una parte de nuestra vida que puede al final darnos más dolores de cabeza que satisfacciones.
Espero no ofender a nadie con lo escrito, y desde el respeto, estas son mis reflexiones sobre una parte que considero muy importante en mi vida. No me puedo apuntar el mérito de algunos de los comentarios que he redactado, son parte de opiniones de otras personas en las conversaciones mantenidas con las que estoy totalmente de acuerdo.
Para terminar, decir que el Congreso fue estupendo, como siempre y que seguimos aprendiendo sobre los diferentes aspectos de la escritura, lectura y edición. Felicitar a Trini por mantener una convocatoria anual tan bonita y animarla a continuar, para poder disfrutar cada primer fin de semana de julio de una preciosa ciudad y de la relación con gente tan especial y maravillosa como son las personas con las que nos encontramos.
Añadir que estoy llena de energía positiva gracias a las amigas con las que me he reencontrado y a las que quiero. Hacer una mención especial por las que no pudieron acudir, pero seguro que en otra ocasión será, también os quiero.


Saludos.